*El promotor de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valero, advirtió que policías ciudadanos ingresarán al puerto para perseguir gente que extorsiona a pobladores de la Costa Chica y que se esconden en las colonias Las Cruce y Emiliano Zapata; regresan desplazados a Xaltianguis, encuentran sus casas incendiadas y saqueadas; desde mayo dejaron sus hogares 250 adultos y un centenar de menores por la violencia, denuncian
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 26 de Noviembre de 2019.- El promotor de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valero, advirtió que policías ciudadanos ingresarán a Acapulco para perseguir gente que extorsiona a pobladores de la Costa Chica y que se esconden en las colonias Las Cruce y Emiliano Zapata.
En conferencia de prensa en esta capital la tarde de ayer, señaló que la extorsión ha aumentado contra los transportistas y comerciantes de varios municipios de la Costa Chica por lo que su organización de autodefensa comenzará a trabajar a partir de este martes contra los responsables a través de una base de inteligencia de datos.
Aseguró que han detectado que los extorsionadores se esconden en Acapulco por lo que ingresarán con la Policía Ciudadana con la justificación de que liberarán a la ciudadanía de los delincuentes.
“En cuanto se detecte la persecución de alguien y el número que salga de ahí, se actuaría en Acapulco con toda la estructura que se tiene en la zona, y vamos a entrar en cualquier parte de Acapulco”, respondió al ser cuestionado cuándo ingresarían al puerto.
Dijo que en los últimos días han recibido más de 50 llamadas de comerciantes y familias de la Costa Chica acusando que han sido extorsionados, sin precisar de qué municipios. Respecto a los enfrentamientos con de la UPOEG con Los Dumbos, dijo que fueron a liberar Xaltianguis y como la Guardia Nacional ya asumió la seguridad de la zona, son ellos quien se encargan.
DESPLAZADOS DE XALTIANGUIS EN MARCHA-CARAVANA EXIGEN SEGURIDAD
Desplazados del poblado de Xaltianguis, zona rural de Acapulco, realizaron marcha-caravana y exigieron seguridad a las autoridades correspondientes para regresar a sus hogares.
En entrevista, uno de los afectados por la violencia y la inseguridad que pidió omitir su nombre por temor a represalias, acusó al ayuntamiento de Acapulco por hacer “caso omiso” al apoyo solicitado para regresar a sus viviendas.
Y agregó: “Desde el 7 de mayo salimos de Xaltianguis por la violencia y nuestros hogares fueron saqueadas y destruidos”.
En la marcha-caravana participó medio centenar de personas y fue resguardada por militares y personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
La marcha de protesta partió del poblado Los Órganos al centro de Xaltianguis, posteriormente mostró el saqueó en algunas viviendas de su propiedad.
La entrada al poblado está un retén del ejército mexicano y sus calles son vigiladas por personal de la marina así como ministeriales y policías municipales y estatales.
Los comercios, escuelas y mercados operan de manera normal, sin embargo, el miedo se percibe entre sus habitantes.
Uno de los afectados, que pidió el anonimato por temor a represalias, aseguró que desde el 7 de mayo dejaron sus hogares 250 adultos y un centenar de menores, sin embargo, aseguró que actualmente son más de mil los desplazados por la violencia y la inseguridad.
Insistió: “Muchos salieron después del 7 de mayo porque obligaron a sus hijos a incorporarse a la delincuencia. Tuvieron que salir por el temor, otros por extorsiones y otras familias por los secuestros. Hay muchos desplazados”, subrayó.
Finalmente los desplazados responsabilizaron al ayuntamiento de Acapulco de lo que pueda ocurrir a las familias de los desplazados por el “caso omiso” a su solicitud de apoyo para regresar a sus hogares
ENCUENTRAN DESPLAZADOS DE XALTIANGUIS SUS CASAS INCENDIADAS Y SAQUEADAS
Incendiadas, saqueadas y en total desorden fue como desplazados por la violencia encontraron sus casas, a su regreso al poblado Xaltianguis del puerto.
El miedo y la tristeza se reflejaron en los rostros de los habitantes al ver las condiciones de sus hogares, después de siete meses de haber tenido que abandonarlos.
En un recorrido, en un predio se observaron unas cinco casas, una de ellas totalmente quemada y por lo tanto, inhabitable; un trabajador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos señaló que fue algo inhumano lo que hicieron los integrantes del grupo armado Los Dumbos.
En dicha casa, perteneciente a una familia de cuatro, tanto camas, sillones, trastes y hasta un altar de una imagen fueron incendiados.
Los dueños, empleados, y sus hijas, maestras, que indicaron que les robaron el refrigerador, la estufa, televisiones y otros aparatos.
Otras dos casas también fueron saqueadas y encontradas con ropa tirada en el piso, las camas desarregladas y cajones abiertos, así como con basura, como botellas de plástico y colillas de cigarro, entre otras cosas.
Vecinos indicaron que ahí vivieron algunos miembros de Los Dumbos.
También les comentaron a los policías y al personal de Derechos Humanos que temen que haya explosivos adentro y recomendaron iniciar una búsqueda de fosas clandestinas en la comunidad.
Los desplazados señalaron que tuvieron que dejar sus trabajos y sus negocios, cambiar por completo su vida; algunos rentan en sus casas nuevas, otros tuvieron que irse a vivir con familiares. (Redacción/Con información de Juan José Guadarrama)
