- “Me vendieron con un señor, me violó y embarazó. Cuando escapé, la autoridad me regresó con él”, denuncia Petra, de 16 años
- “Mi nombre es Julia, tengo 15 años, mi papá me violó y mi familia me obligó a perdonarlo”, se lee en la cartulina que sostiene otra de las seis niñas que hicieron pública sus denuncias en redes sociales desde la Montaña
- Violencia contra menores va en aumento en la Montaña, denuncia Tlachinollan
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 25 de abril de 2021.- La Colectiva Nacional Feministas (CONAFEM), compartió testimonios de niñas de la región Montaña de Guerrero que han sido violadas o agredidas sexualmente, ante la indiferencia de las autoridades procuradoras de justicia que las invisibiliza y se niega a investigar sus casos con perspectiva de género.
“La violencia sexual en Guerrero y todo el país es muy grave y compleja por eso, desde la CONAFEM, exigimos que ningún agresor sexual en esté en el poder, ni en las calles, ni en las casas, ni en las escuelas, ni cerca de ninguna niña y mujer a la que pueda hacer daño. ¡No más violencia!”, se lee en la publicación que compartieron.
Aunque los testimonios fueron publicados el 29 de octubre del año 2020 desde la página de Marea Verde Guerrero, para visibilizar la violencia que viven las niñas de la región y criticar una propuesta en el Congreso que pretendía limitar aún más el derecho al aborto para víctimas de violación.
La serie de fotografías fue compartida nuevamente en la página de Facebook “La Masquerida de Guerrero” y volvió a hacerse viral, a más de cinco meses de haber sido publicadas.
Con las fotografías con los testimonios escritos en cartulinas, se acompañan del siguiente texto:
“Desde la Montaña Alta de Guerrero condenamos la discusión que lleva al retroceso de la Norma 046. No pueden hacer oídos sordos las diputadas y diputados del Congreso ante la cruel realidad de las mujeres y niñas de las distintas regiones de Guerrero, desde su privilegio se niegan a escuchar a las víctimas con estas reformas retrogradas que obstaculizan la aplicación de la norma 046”, se lee.
LOS DESGARRADORES TESTIMONIOS DE LAS NIÑAS VIOLADAS EN LA MONTAÑA
Martina, de 13 años de edad, denunció que su tío la violó y, cuando acudió al ministerio público, las autoridades no le creyeron.
Andrea, también de 13 años, acudió al ministerio público para denunciar que su vecino abusó sexualmente de ella, sin embargo, las autoridades les dijeron que llegaran a un acuerdo, por lo que el agresor continúa libre.
Reina, de 8 años, acusó a su maestro por abusar de ella, pero nadie creyó en su palabra. Esta situación la llevó a dejar la escuela, sin embargo, el agresor continúa dando clases.
Mientras que Victoria, de 14 años, confesó que planifica a escondidas por temor a quedar embarazada de su agresor, con el que convive todos los días.
“Me vendieron con un señor, me violó y embarazó. Cuando escapé, la autoridad me regresó con él”, apuntó Petra, de 16 años.
“Mi nombre es Julia, tengo 15 años, mi papá me violó y mi familia me obligó a perdonarlo”, se lee en la cartulina que sostiene otra niña.
La revista Proceso, en su versión Web, señaló en una publicación que estas situaciones son comunes en la región, donde ya se registraron dos casos de feminicidios en lo que va del año, mismos que se suman a los 20 que fueron documentados por el Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan” en 2020.
De acuerdo a la nota de Proceso, el Centro anunció que la semana pasada se llevó a cabo la “Campaña por la vida: Mar de agravios, Montaña de quebrantos” para visibilizar la situación de violencia que enfrentan las mujeres indígenas de la Montaña de Guerrero y los obstáculos estructurales que existen para hacer efectiva la protección de sus derechos.
Sus integrantes denunciaron que pese a la violencia que continúa en aumento en la región, las autoridades hacen oídos sordos a las denuncias de las víctimas y han concentrado sus energías en las campañas electorales.
