El “chapulineo” de políticos de partidos en partidos, es una irresponsabilidad, amor al poder, incongruencia y poco compromiso con la sociedad, como lo ha demostrado Juan López de Jesús con sus desmedidas ganas de poder.
Este funcionario de la administración estatal priista, no ha cumplido ni a cabalidad con sus responsabilidades en la Sedesol estatal y ya está pensando en irse sin darle las gracias a sus jefes políticos del PRI para contender por otro puesto político, pero ahora bajo sus nuevas siglas: Morena.
Aunque Juan López promete convertirse en el cambio generacional de la política que Atoyac necesita, pretende migrar al partido Morena con las viejas prácticas del tricolor de los años 60. Mientras López de Jesús en sus discursos presumen de aniquilar viejas prácticas priista, pero en los hechos sigue practicando muchas de ellas, como saltar de un partido político a otro para garantizar cargos de elección públicos.
En corto tiempo, este personaje ha “quemado” sus naves políticas brincando de un partido a otro solo, jurando lealtad hoy y cambiándose mañana por conseguir un cargo.
Si bien todos los políticos se han ganado una fama de oportunistas, existen unos como Juan López, que, con sus acciones, refrendan con mayor ahínco dicho calificativo.
Juan López trabajó en la administración perredista de Ángel Aguirre, posteriormente con el arribo del PRI al gobierno del estado, militó activamente en el tricolor, pero al negarle la candidatura a la alcaldía de Atoyac, decidió cambiar al desaparecido partido PANAL.
Hasta hace unos días todavía militaba en el PRI y seguía con su sueño guajiro de gobernar el municipio de Atoyac de Álvarez, pero ante la falta de trabajo político, de credibilidad entre los atoyaquenses por falta de lealtad, ahora busca adentrarse en el partido Morena.
Este fin de semana, aprovechando la visita del aspirante a la candidatura de Morena a la gubernatura de Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, en la comunidad de Zacualpan, el defenestrado priista “se le ofreció” como si practicara el oficio más antiguo del mundo, al exdelegado federal con la condición que lo haga presidente municipal de Atoyac.
Lamentablemente para Juan López, ya nadie cree en su proyecto, y en las filas de Morena le mandan a decir que ellos tienen candidatos de sobra en Atoyac, y que si desea cambiar de partido por cuarta vez (antes en PRD, después en Panal y ahora en el PRI), lo recibirán con la condición de que se dedique en Morena a lo que por años ha hecho: “matraquero de candidatos”, hasta que sus méritos partidistas y lealtad sean suficiente para encabezar la Cuarta Transformación en el municipio.