Editorial
Apenas las autoridades de turismo estaban implementando estrategias contundentes para promocionar al puerto de Acapulco, que sufría los embates del turismo por la inseguridad, cuando se anuncia que una nueva amenaza por los recortes al presupuesto de turismo en el paquete económico 2020 lo dejarán en la lona. Afortunadamente, a casi 45 días de las vacaciones de fin de año, Acapulco está de pie. La carretera México-Acapulco está lista para recibir a miles de automovilistas y la carretera federal está muy segura. En la zona hotelera y la habitacional de Punta Diamante ya están reservados varios cuartos de hoteles… las tiendas de autoservicio y gasolineras, así como las playas están totalmente limpias y libres de “enterococos” y bacterias. ¿Por qué entonces los turistas extranjeros no han regresado? ¿Falta de información? ¿Miedo? Son algunas de las preguntas que se hacen todas las personas que ahí trabajan y que tan severamente vaticinan que se verán afectadas el próximo año por la falta de recursos para este ramo. ¡Vayamos a Acapulco!