Atoyac de Álvarez, Gro., 10 de Marzo de 2019.- Yolanda Reyes, una mujer que se levanta muy temprano, sale desde donde vive al lado de su madre y va al mercado sola, no se pierde en el camino antes de agarrar algo lo pide ella, aunque no concuerda bien sus conversaciones, jamás olvida una cara sabe de quién eres hijo y te saluda, la mayoría de las veces se despide y dice “me saludas a mi suegra”.
Siempre te ofrece lo que tiene y aunque muchas personas se molestan con ella, nunca deja de sonreír, ella fue esposa de un conocido maestro de la secundaria 14 de nombre Juan, quien impartía clases de taller de Carpintería, con la que tuvo un bebé hombrecito, desgraciadamente murió y ella no soportó la perdida y se perdió en su trance de dolor, ella no es mala persona, siempre trata con respeto a las personas y es feliz en su mundo.
Ella tenía su hogar siempre limpio, además tenía muchas atenciones con su esposo y amaba a su familia, pero su vida cambió al momento de perder a su retoño y quedó aún en el tiempo de Chavarría.
Aunque para los gobiernos ella no exista, ella es feliz y vive contenta, es una de las personas que poco se enferma; no cuenta con ayuda del gobierno, porque para ellos es invisible este tipo de personas.
Ha luchado una y otra vez cayéndose y levantándose aunque nadie le dé una presea o mínimo una despensa, solo los comerciantes del mercado “Perseverancia”, aunque se molestan con ella la dejan algunos que agarre unas verduras, otros la regañan.
Hoy Yola, como es conocida por todos, no conoce que se conmemoró el Día de la Mujer pues no sabe de festejos ni conmemoraciones, Yolanda solo es una mujer la cual se ha ganado el respeto y cariño de los atoyaquenses y aunque no leerá esto, te digo, Yola tú eres un icono más de nuestro municipio. (Por Cuauhtémoc Rea Salgado)