Por César González Guerrero
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) como empresa propiedad del Gobierno Federal al servicio de todos los mexicanos, fundada el 14 de agosto de 1937 por el gobierno del Gral. Lázaro Cárdenas, es la responsable de controlar, generar, distribuir, transmitir y comercializar la energía eléctrica y consecuencia es la encargada de otorgar a la población en general un servicio eficiente y de calidad. A 83 años de su creación se hace necesario modernizar y actualizar su funcionamiento para bien de México.
Desde hace muchos años, la Costa Chica del estado de Guerrero ha permanecido olvidada por los diferentes gobiernos de la República y a esta fecha aún siguen asuntos pendientes que, por diferentes razones, no se solucionan tal y como lo hemos señalado en otras ocasiones. El servicio de la energía es un problema que requiere de una atención urgente a fin de evitar posibles desgracias que lamentar.
Yo recuerdo que desde el año 1960 en que se instalaron los primeros “postes” y “cableados” en la ruta Acapulco-Ometepec-Cuajinicuilapa, desde luego el alumbrado “publico” en las cabeceras municipales, y en consecuencia el servicio de energía eléctrica “doméstico”, son muy escasos los servicios de mantenimiento, rehabilitación y modernización eléctrica en toda la región.
Tal vez ya las autoridades conozcan detalles al respecto, pero solo para ejemplificar se pueden señalar la existencia de grandes cantidades de “postes y cables caídos”, transformadores inservibles, “postes” ya deshechos por tantos años sin atención, cables sobre el piso o “colgados”, todo ello a la vista de todos y no hay nadie que solucione. Y cuando hay alguna queja, la respuesta es que: “no se ha recibido ningún reporte” y mientras no se haga no se pueden atender. Así es la burocracia desgraciadamente.
Son temas que tal vez los propios ayuntamientos no los consideran en sus planes de desarrollo o sencillamente no han sido atendidos por las instancias correspondientes, pero sin duda, tienen parte de responsabilidad para que este problema ya no siga afectando la economía de los Costachiquenses.
Por ello considero pertinente insistir en la necesidad de que alguna autoridad municipal, estatal o federal, realice las gestiones y acciones para que de una vez por todas se terminen los problemas que tanto afectan a la población, con sus frecuentes “apagones” que causan daños a sus aparatos domésticos, más a los establecimientos comerciales como restaurantes, hoteles, de las principales zonas turísticas de la región, situación que se complica en las temporadas de lluvias y desastres naturales.
Es un daño que durante más de 60 años la gente ha soportado y esperando que la Comisión Federal de Electricidad cumpla su compromiso social en los 15 municipios de la Costa Chica sin ninguna presión social como bloqueos de carreteras u oficinas de gobierno, que se ha hecho costumbre.
Para la CFE existen una serie de argumentos para no solucionar la problemática del servicio de energía eléctrica en la Costa Chica, como la falta de pagos de los usuarios, la falta de presupuesto para cumplir su responsabilidad, la carencia de instrumentos y materiales eléctricos adecuados, la falta de personal calificado, hasta culpar a los sindicatos y trabajadores de su inoperancia, también culpan a los usuarios que no “derraman” sus árboles o palmeras, y la CFE llega al extremo de culpar a los gobiernos estatales y municipales de no hacer nada para evitar esta problemática. O sea, como se dice vulgarmente “se echan la bolita”.
A los usuarios no le interesan los argumentos para justificar la falta de atención y solución, a los usuarios sólo les interesa que la CFE solucione urgentemente los problemas de la mejor manera. Ya veremos.
