El regreso a clases presenciales en el próximo ciclo escolar, solamente el presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador se la cree, derivado a la que las condiciones en la que nos encontramos y al estar en semáforo rojo, es imposible que el 30 de agosto se regresa a clases presenciales; es un acto peligroso y siniestro querer que millones de estudiantes regresen a sus salones de clases.
Pues como ya es conocido, López Obrador dice cualquier tontería y barbaridades en los medios de comunicación y en las mañaneras, puesto que éste, encabeza un gobierno de ocurrencias, el piensa que están dadas las condiciones en México para el regreso a clases por la vía presencial, sin tomar en cuenta las condiciones de alto contagio que prevalece en las entidades.
Se prevé que el regreso a clases, de nueva cuenta será a distancia y por internet, tal como se realizó en el semestre pasado las escuelas seguirán cerradas al menos hasta el mes de enero del año 2022 como una acción de prevención y cuidado de la salud de los jóvenes, niños y estudiantes tanto del estado de Guerrero y de todo el país.
Solamente los chairos y aquellos que siguen embobados con las barbaridades de López Obrador, le ven el lado positivo a todas las tonterías que dice el mesías presidente de México, si el peje dice cosas buenas o malas, los chairos la respaldan a cabalidad; para ellos todo es bueno y justifican cualquier tipo de acciones que haga desde el Palacio Nacional el jefe del ejecutivo federal.
Pero regresando al asunto de las clases presenciales en México y en Guerrero, se especula un futuro incierto para la educación, ya que siguen los comentarios en las sociedades de que no es igual el nivel de aprovechamiento y de conocimientos que se obtiene como cuando se acude personalmente a la escuela, no es lo mismo tomar clases en línea por medio de una computadora a recibir cátedras en aulas frente a un profesor. Hay de por medio un efecto negativo porque muchos de los estudiantes pierden el interés por estudiar y se ha incrementado el índice de desertores escolares.
Ante tal situación adversa a todos los intereses de la sociedad por la pandemia que padecemos, hay un presidente de México “trasnochado” y que solamente él en su cabeza cree que hay las condiciones para el regreso a clases el 30 de este mes, situación que raya en el populismo, en la simulación y en la mentira.