Editorial
En México la desigualdad económica y social es un problema grave. México forma parte del 25% de los países con mayores niveles de desigualdad. El coeficiente de Gini se ubica en 0.48, donde 1 es el punto que corresponde a la perfecta desigualdad y 0 es el punto óptimo de igualdad, según datos del Banco Mundial (BM). La desigualdad en nuestro país es por demás pronunciada, debido a que 76.2 por ciento de la riqueza está en manos de 1.3 millones de personas, principalmente en 122 mil más ricos del país; en este grupo selecto, las familias tienen por lo menos un millón de dólares. Esto resulta alarmante, si tomamos en cuenta que somos 126 millones habitantes en México. El dato se recrudece cuando se compara al saber que, alrededor de 7 millones de mexicanos viven con un dólar con 90 centavos, lo que equivale a unos 38 pesos. Claro, esta cifra aparece si se contabiliza la pobreza extrema en México con los criterios de la ONU, porque si se hace con los de la INEGI, la escalofriante cifra arroja 11.4 millones de personas viviendo en pobreza extrema. Lo peor es que no se ve para cuando se vaya acabar con este lastre, heredados por los gobiernos del PRI y PAN.