Editorial
En los últimos días Guerrero ha sido noticia nacional al ser considerado por la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en la sexta posición con más incendios forestales activos. Lo anterior, luego de que, en al menos ocho municipios de la entidad, se han reportado 11 siniestros contra bosques y pastizales. Miles de hectáreas de árboles y auténticos pulmones naturales se están muriendo por las quemazones en varias partes del país. En México estamos acostumbrados a ver ríos contaminados, barrancas como basureros, presas llenas de basura, playas contaminadas, botellas de plástico por doquier, drenajes donde pulula basura, industrias que desalojan sus desechos donde se les da la gana y un sinfín de delitos ecológicos que gozan de total impunidad. Todos tenemos algo de culpa: las autoridades, los ciudadanos, los delincuentes. Estamos «cooperando» para que el mundo deje de ser amigable.