Editorial
Rumbo a las elecciones de 2021, en las que se renovarán 15 gubernaturas, entre otros cargos de elección popular, las alianzas y coaliciones entre diversos partidos políticos, incluyendo algunos que históricamente han sido rivales, comienzan a cocinarse para lograr el mayor número de victorias. En la puja electoral por la gubernatura de Guerrero la alianza Morena, Partido Verde y PT se concretó anoche, al igual que sucede con los eternos rivales PRI y del PRD, que ayer entregaron ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPEC) el convenio de coalición para registrar una candidatura común para el Gobierno de esa entidad, con el argumento de que no traicionan sus principios y que las diferencias no son para siempre. Aunque ambas alianzas pregonan que los puntos de encuentro se relacionan más con la necesidad de garantizar gobernanza y darle estabilidad a la entidad, lo cierto es que para nadie es extraño que los único que mueve a estos partidos, es la ambición de poder. Al final de cuentas, votaremos por la misma clase de políticos, tratase de partido que sea.
