Por César González Guerrero
Antes de nacer, los padres están preocupados por el futuro de los hijos; después del nacimiento la preocupación es por la salud y el buen desarrollo de los pequeños; regularmente después de los 5 años, los padres se preocupan por los estudios de los hijos, pensando en que algún día obtendrán un título para trabajar en el sector público o privado, ocupando cargos importantes. Por supuesto, los pequeños a partir de esa edad se están preparando para iniciar una larga jornada de estudios que durará por lo menos 20 años.
Esto significa que a partir de los 21 años el joven está en condiciones de mostrar sus capacidades y conocimientos. No todos destacaran, sólo quienes alcancen reconocimientos públicos suficientes para escalar posiciones de prestigio y que sus resultados se reflejen en el beneficio de la sociedad. En la historia universal, nacional, estatal y regional hay muchos ejemplos de personajes que han logrado servir y servir bien; no importa el nivel, lo importante es servir.
Aquí en Guerrero, desde los tiempos de su conformación territorial, encontramos en los antecedentes históricos a hombres y mujeres que ya están en las páginas de los libros. Unos con resultados favorables y otros no. Depende mucho de la óptica con la que se les mire.
Actualmente, a partir del 2015, Héctor Astudillo Flores, está experimentado momentos de éxito como Gobernador del Estado de Guerrero, gracias a que desde su origen ha sido formado en la cultura del esfuerzo y no del privilegio. Su preparación profesional, así como su desempeño en diversas actividades laborales, muestran al pequeño, al adolescente y al joven inquieto, superando retos que todos enfrentamos en nuestro desarrollo humano y profesional. El tiempo es quien dirá la última palabra.
En la competencia natural por sobrevivir en todos los aspectos, más en lo profesional y político, sus acciones han sido evaluadas escrupulosamente y es por ello que su imagen de gobernante a esta fecha, es una de las mejores calificadas a nivel nacional, a pesar de que, desde luego, no faltan sus críticos y adversarios políticos (no personales).
Para dimensionar su obra de gobierno en estos 5 años, solo basta observar serenamente el escenario en que él llegó al poder ejecutivo y el momento actual. Son situaciones que si las comparamos nos indican que, como dicen los campesinos de mi tierra: Astudillo “…va Sacando el surco…”. Por lo menos en la Costa Chica su obra está a la vista con el proyecto del cuarto polo de desarrollo turístico Playa Azul- Playa Ventura en el municipio de Copala. Solo por mencionar un ejemplo que lo hace acreedor al Reconocimiento de los costachiquenses y copaltecos.
A nivel estatal no se diga, hay cientos quizás miles de acciones en las 7 regiones y los 81 municipios que el espacio no sería suficiente para enumerar. Tal vez la obra más importante es la tranquilidad y paz social en la cual vive Guerrero.
Los últimos 12 meses de la gestión gubernamental de Héctor Astudillo Flores servirán para afianzar su prestigio como gobernante ejemplar, y para los guerrerenses bien nacidos siempre será un modelo a seguir. Eso esperamos.