Editorial
El daño por corrupción en Petróleos Mexicanos (Pemex), sucedido durante el año 2014 durante el gobierno de Enrique Peña Nieto en el que se involucra a la empresa Oceanografía, fue por más de 3 mil millones de pesos, con el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador existe la esperanza de que se vaya a proceder contra quienes lo propiciaron, así como regular más todo lo que tenga que ver con la empresa, sobre todo ante los años de corrupción a los que fue sometida la paraestatal durante los sexenios panistas y priistas. No podemos darnos el lujo de acciones similares en el esquema de renovación de la paraestatal y también creo que debe haber un ajuste en cuanto a las contrastantes prestaciones de los trabajadores ante su baja productividad, respecto al grueso de la población. Urge una demanda de naturaleza económica, pues no vaya a suceder que la petrolera nacional se nos venga abajo en el momento menos esperado.