*Guerrero ha perdido a uno de sus hijos más representativos, señala Héctor Astudillo sobre el exgobernador
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 28 de julio de 2021.- El gobernador Héctor Astudillo Flores aseguró que tras el deceso del exmandatario y coordinador de la bancada de los diputados del PRI en la Cámara Baja, René Juárez Cisneros, Guerrero “ha perdido a uno de sus hijos más representativos”.
Este miércoles, el gobierno del estado realizó una ceremonia luctuosa en homenaje a quien fuera alcalde de Acapulco durante el periodo 1990-1993, quien perdió la vida por secuelas del Covid-19 el pasado lunes 26 de julio.
El acto se desarrolló en la explanada del Recinto del Poder Ejecutivo, en Chilpancingo, al cual acudieron sus familiares, los ex gobernadores Rubén Figueroa Alcocer, Zeferino Torreblanca Galindo, colaboradores y amigos.
En su mensaje, Astudillo Flores dijo que a Juárez Cisneros lo conoció “muy joven” jugando futbol en la capital, cuyo deporte “amó y practicó durante muchos años de su vida en un equipo combinado entre acapulqueños y chilpancinguenses. Este fue mi primer contacto con René Juárez”.
Agregó que convivió con él cuando, desempeñándose como presidente municipal de Acapulco, fue su secretario particular, y que nunca se imaginó después ser su coordinador general de campaña cuando fue candidato al gobierno del estado entre 1998 y 1999.
Respecto a su papel como servidor público, aseguró que gobernó un Guerrero complejo, con carácter, sin improvisaciones y siempre resolviendo las problemáticas que le demandaban. “Tenía dignidad, habilidad y lealtad”.
“Se formó y colaboró con gobernadores como Alejandro Cervantes Delgado, Francisco Ruiz Massieu” y siempre tuvo un acercamiento respetuoso con Ángel Aguirre Rivero, Zeferino Torreblanca Galindo, Rogelio Ortega Martínez, Rubén Figueroa Alcocer.
También aseguró que defendió las comunidades afromexicanas y cuando tuvo la oportunidad de ser por primera vez legislador federal impulsó reformas a la Constitución Mexicana para que se les reconociera ante la ley, y que fue un municipalista, al crear municipios como José Joaquín de Herrera, Cochoapa el Grande, Iliatenco y Marquelia.
Es por ello que, dijo, con su muerte “Guerrero ha perdido a uno de sus hijos más representativos. René Juárez actuaba como guerrerense, hablaba como guerrerense y tenía carácter de guerrerense”.
Siguió diciendo: “René Juárez Cisneros toda su vida luchó; fue un luchador que tuvo grandes desafíos en su vida: luchó en esta batalla (del Covid) más de tres meses, a la pandemia le costó más de tres meses vencerlo, (pero) nos quedamos con su legado: de soñar y lograr hacer realidad nuestros anhelos y sueños: “no importa nuestra condición económica, cuando se quiere, se puede”.
Tras su mensaje, el gobernador y sus antecesores Rubén Figueroa Alcocer y Zeferino Torreblanca Galindo (cabe mencionar que no asistieron Ángel Aguirre Rivero ni Rogelio Ortega Martínez), montaron una guardia de honor alrededor de la urna fúnebre en la que se encuentran las cenizas de Juárez Cisneros, tras ser cremado ayer.
De la misma forma lo hicieron las hijas e hijos, su esposa, sus colaboradores, sus amigos, la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, Eunice Monzón García y el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Alberto López Celis.
Mientras que, entre los familiares de Juárez Cisneros, estuvo Virginia Campos Perea, quien era su actual pareja, así como sus hijos Ana María y Rene Juárez Albarrán; María René, Carmen Andrea y Carlos Emiliano Juárez Acevedo; Mariana y Ricardo Juárez Campos; Atenas Juárez Olagivel, así como Bernardina y Ricardo, hermanos del fallecido.
Enseguida, la banda de guerra de la Secretaría de Seguridad Pública del estado interpretó el toque del silencio en memoria del ex mandatario priísta y se entonó el himno a Vicente Guerrero, y finalmente una de las hijas retiró en sus brazos la urna fúnebre que hasta el momento se desconoce en dónde va ser depositada.
