*Advierten familiares que presentarán una queja ante la Comisión de Arbitraje Médico y una denuncia ante la Fiscalía
Por Rangel Ventura
Atoyac de Álvarez, Gro., 24 de junio de 2021.- En un nuevo escándalo más de negligencia médica se encuentran metidos los doctores del hospital general “Dr. Juventino Rodríguez García” de la ciudad de Atoyac de Álvarez, luego de que se reportara el fallecimiento de otro bebé que fue intubado supuestamente de manera errónea y sin la autorización de los padres.
En una denuncia hecha llegar a la redacción de OBJETIVO Diario, la joven Ana Lucero Radilla López, de 21 años de edad, vecina de la colonia Mariscal, culpó al personal médico de ese nosocomio de haber provocado la muerte de su bebé recién nacido de nombre Adrián Zamora Radilla, “los médicos del hospital de Atoyac mataron a mi bebé, por negligencia médica”, acusó la afligida mujer.
De acuerdo a la información de la señora Ana Lucero, ella dio a luz a su hijo en cesárea en el hospital general el pasado lunes a las 10 de la noche con 51 minutos, aunque, de inmediato los doctores lo enviaron a cuneros, donde lo tuvieron en observación.
“Mi bebé no nació enfermo, a mí me lo entregaron en mis brazos cuando nació, me dijeron que estaba todo bien (…) fue la mañana del martes cuando me dijeron que tenía problemas para respirar y lo enviaron a cuneros a observación”, narró la mujer.
Sin embargo, a todas luces ella vislumbró la negligencia médica y total hermetismo con la que estaban tratando el caso de su hijo, por lo que el miércoles se le hizo raro que al irlo a visitar a cuneros y preguntar cómo seguía, le dijeron que estaba estable.
“Como yo sospechaba algo raro, yo no me conformé, y a las 2 de la tarde les pedí que me entregaran a mi bebé para trasladarlo al hospital de Acapulco, donde tengo un familiar, sin embargo, a las 3 de la tarde, resulta que me salen con la sorpresa que había fallecido, de una complicación respiratoria”, dijo entre llantos.
La joven Ana Lucero Radilla, dijo que al observar el cuerpo de su hijo, notó que estaba morado de los labios y la cara, y al preguntar a los médicos, le dijeron que era porque había sido intubado, “pero yo nunca les di la autorización para algo así, me dicen los médicos especialistas que consulté, que mi hijo pudo morir por la mala intubada que le hicieron los médicos, por eso antes de intubarlo, me debieron haber pedido permiso a mi o a mi esposo”, acusó.
Continuó relatando: “Solo me dijeron que mi niño había caído en un paro respiratorio, todo fue muy rápido, nos dijeron que iban a tratar de revivirlo, que tenían 30 minutos para hacerlo, que si no respondía mi bebé lo iban a lamentar (…) pero resulta que a los 10 minutos pidieron hablar con un familiar y fue mi esposo, le dijeron que nuestro hijo había fallecido y solo le dijeron que fuera comprar su cajita”, recordó con impotencia.
Señaló que encima de todo, con total descaro los directivos del hospital se atrevieron a cobrarle cerca de 6 mil pesos, supuestamente por el medicamento que le aplicaron.
Cabe señalar que este hospital es dirigido por la directora interina, doctora Verónica Pineda Pino, quien a pesar de tener varias quejas por muertes por negligencia médica de niños y adultos en lo que va de este año, curiosamente este nosocomio no ha sido investigado por las autoridades competentes, ya que se encuentra “protegido” por el secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos.
Por ello, los familiares cansados de las corruptelas solapadas por el titular de la SSA, Carlos de la Peña, decidieron hacer pública su denuncia y revelaron las irregularidades en el caso de este niño recién nacido, que lo llevaron a su muerte.
Los familiares advirtieron que solicitarán la intervención de la Comisión de Arbitraje Médico (CAM), y presentarán una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG) y una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado, para que investiguen y descarten si hubo negligencia médica del personal del hospital general de Atoyac y determinen la responsabilidad del titular de la SSA, Carlos de la Peña, quien ha mostrado “oídos sordos” ante tantas muertes en ese nosocomio. (Por Rangel Ventura)
