Editorial
La ley es la ley y nadie puede pasar por encima de ella… entre ciudadanos comunes y corrientes porque entre la saga política, no cuenta. Tomás Zerón de Lucio, exjefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la entonces PGR, implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, interpuso un juicio de amparo contra la nueva orden de aprehensión en su contra. No se le debe conceder ningún beneficio y menos de esa naturaleza, su cinismo es insultante y provocador, porque puede ser que algún «compadecido» juez o jueza le conceda casi «su libertad» y sea el detonante para que otros presos convictos y confesos por el Caso Iguala también pidan ese beneficio… pues recordemos que estamos en México, en el País donde no pasa nada apegado a la ley y conforme a derecho, aunque hay abogados que lo enchuecan todo y hasta propician fugas extraordinarias de las cárceles de alta inseguridad, que de seguridad no tienen nada. Ojalá no le permitan a Tomás Zerón lo que pide porque es una delincuente como cualquier otro y no tiene razón de solicitar semejante beneficio.