Por César González Guerrero
El estado de Guerrero, por su origen e historia, representa una de las entidades federativas con mayor rezago histórico, pero también paradójicamente, es tierra fértil para producir y cuenta con un gran potencial en recursos humanos y naturales para continuar por la ruta del progreso.
Nuestra tierra, desde su fundación en el año 1849, se localiza en una zona geográfica accidentada pero eso no ha sido obstáculo para avanzar hacia el desarrollo. Esa desventaja también tiene su lado positivo; desde la Prehistoria, en la Conquista, la Independencia y la Revolución, las mujeres y hombres guerrerenses no sólo han resistido, sino también han aportado su cuota de sangre para bien del país. La historia de México así lo registra.
Quienes han hecho posible que Guerrero esté presente en las luchas nacionales, sin duda, también están inscritos en las gloriosas páginas de la vida institucional. Quizá unos menos que otros o unos más que otros. Depende de los criterios de cada quien. Creo hicieron su mejor esfuerzo y cumplieron de acuerdo con sus tiempos y circunstancias.
Los más de 170 años de vida como entidad suriana no han pasado desapercibidos y tampoco han sido en vano. Hay resultados favorables, instituciones sólidas y guerrerenses dispuestos a seguir los pasos de grandes e ilustres personajes, dispuestos a sacrificar su propia vida si es necesario. Existen varios ejemplos.
Precisamente hoy, a raíz del surgimiento de la crisis sanitaria del COVID 19, los guerrerenses estamos sometidos a otra prueba más de resistencia, unidad y fortaleza para salir victoriosos. Por supuesto, como en todas las dificultades, no siempre se gana pero si se lucha. Y los guerrerenses sí estamos luchando, desde cada una de nuestras trincheras, para evitar que los daños sean mayores.
En este contexto vale la pena destacar y reconocer los esfuerzos de las autoridades nacionales y estatales en la lucha por la salud y vida de toda la población, sin exclusivismo o distinción. Eso no es mérito personal, es una responsabilidad y compromiso con la sociedad mexicana.
Aquí en Guerrero, a escasos 4 meses de cumplir 5 años de trabajo y pese a todas las adversidades, el Gobernador Héctor Astudillo Flores ha demostrado su amor a Guerrero, su pasión por gobernar bien y cumplir sus compromisos con un alto sentido de responsabilidad.
El Gobernador Astudillo está enfrentando una realidad que requiere de mucho valor y la solidaridad de los guerrerenses. La gratitud es una virtud del ser humano y nosotros si somos agradecidos.
Deseamos lo mejor para Guerrero y los guerrerenses, especialmente al Gobernador Héctor Astudillo Flores, a su equipo de trabajo y su familia. ¡¡Ánimo guerrerenses!!