*Se han eliminado unas mil 500 hectáreas durante el 2019, informa el comandante de la Novena Región Militar
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 03 de Diciembre de 2019.- El comandante de la Novena Región Militar, Juan Manuel Rico Gámez indicó que este año se ha detectado una disminución en los plantíos de amapola en Guerrero, pues dijo que la erradicación fue menor que el año pasado.
En entrevista este martes, el mando indicó que casi al finalizar el año se han eliminado unas mil 500 hectáreas de amapola en lo que va de 2019 cuando en 2018 la cifra fue de dos mil, mientras que plantíos de marihuana se han destruido unas mil 200.
Detalló que, en la última operación, del 1 de agosto al 23 de noviembre, se destruyeron 580 hectáreas de amapola y entre 300 y 400 de mariguana; dijo que las erradicaciones que han hecho principalmente en la sierra de Chilpancingo, Leonardo Bravo y Tlacotepec.
“(El químico) no genera daños en seres humamos, si se coloca uno por debajo del lanzamiento ocasiona comezón, el químico afecta la hoja de los plantíos ilícitos, amapola y mariguana, no en suelo, no genera problemas en raíz ni agua así que no hay razón en el dicho de esas personas”, expresó.
Dijo que es natural que las personas intenten defender sus plantíos y que es en ese sentido que buscan que no se lleve a cabo la fumigación, sin embargo, dijo, es imposible que el Ejército no cumpla con su actividad. Por otro lado, Rico Gámez aseguró que el Ejército tiene presencia activa en Zirándaro, así como seguridad en la carretera de Ciudad Altamirano y en el entronque a Zihuatanejo.
En cuanto a la presencia de militares en escuelas, indicó que este año se tiene presencia en 256 de Acapulco y 12 en Chilapa.
DESTRUYEN 895 ARMAS CORTAS Y LARGAS DECOMISADAS EN GUERRERO
Este martes fueron destruidas 895 armas que fueron decomisadas en distintas operaciones de seguridad y en campañas de donación en Guerrero lo cual, de acuerdo con el comandante del 50 Batallón de Infantería, Alfredo Montiel Godínez, coadyuva a disminuir la violencia en la entidad.
En el acto desarrollado en la explanada de ese Batallón se mostraron 537 armas largas y 358 cortas, además de algunos cartuchos útiles, de las cuales 295 fueron destruidas por la 35 Zona Militar y 600 por la 27 Zona.
En el discurso oficial Montiel Godínez dijo que para que prevalezca la paz, la tranquilidad y el respeto, se necesita la convivencia de una sociedad sin armas, pues es la principal herramienta que utiliza la delincuencia para llevar a cabo sus actividades ilícitas.
Consideró que la destrucción de armamento tiene una significativa aportación a la seguridad de las y los guerrerenses, y tiene el mérito adicional porque se lleva a cabo de forma conjunta y coordinada entre la sociedad civil, las autoridades, las fuerzas armadas y las corporaciones policiacas.