La Capital
Marcelo VILLANUEVA LUNA
Aunque a los militantes del Partido Regeneración Nacional, mejor conocido como MORENA, cuyo dueño es Andrés Manuel López Obrador, no les guste la idea de que el empresario de Acapulco Luis Walton Aburto, sea el candidato a la gubernatura del estado para el 2021; tendrán que aceptarlo a como dé lugar; lo peor es que deben darse cuenta que el sistema de partidos políticos en México, siempre ha estado a la venta del mejor postor.
Los morenistas de Guerrero y que desde un principio se dijeron ser seguidores de López Obrador de hueso colorado, se tienen que replegar ante la llegada del empresario Walton Aburto. Si es cierto que hay reacciones de algunos diputados de Morena sobre la llegada de este personaje a las filas de este partido y lo están viendo como un gandalla o avasallador al querer arrebatarles la candidatura a gobernador del estado.
Aquí lo cierto es que Walton trae la maleta con mucho dinero y al fin de cuenta eso es lo que ahora importante en los sistemas de partidos políticos, no importa mucho la lealtad a un partido, aquellos que se dicen fundadores y militantes fieles o de hueso colorado de Morena. Deben darse cuenta que el dinero afloja todo; por lo tanto, “el toro sin cerca” Félix Salgado Macedonio, senador de este partido, tiene que hacerse a la idea que no podrá ser candidato a gobernador de Guerrero y nunca podrá llegar a Casa Guerrero, el empresario gasolinero de Acapulco ya lo aventajo con un paso adelante.
Las intenciones de Luis Walton Aburto son muy claras y no renunció a su partido donde él era el dueño el Partido Movimiento Ciudadano, solamente por amor a las siglas de Morena, sino que va en busca de llegar a la candidatura de ese instituto político y poder ser gobernador de la entidad guerrerense, aunque eso está por verse.
El entramado de este sujeto va mucho más allá, al final de cuenta va a tratar de unificar al PMC, con el Partido de Morena, fortaleciendo una alianza y llegar a Casa Guerrero. Lo que si queda muy claro y será un poco cruel, es que los morenistas que se sienten incómodos por la llegada de un extraño, tendrán que apechugar que los que deciden no son ellos o las bases, sino que son los de arriba y como López Obrador no es nada tonto, pues claro que va a inclinar la balanza a favor de su amiguito Luis Walton Aburto, así los demás se paren de cabeza; pero no podrán hacer nada porque este personaje trae la maleta con billetes y al parecer viene con todo.