La Capital
Marcelo VILLANUEVA LUNA
Lo que no deben permitir los trabajadores sindicalizados que forman parte del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud sección 36, es que Beatriz Vélez Núñez continúe en el poder sindical, ya como último reducto popular que le queda, tras haber perdido la alcaldía de Chilpancingo. El dinero y las influencias desde la federación habrán de influir en las elecciones del primero de abril, fecha en la que las bases habrán de decidir que si Bety Vélez continúa en el poder o es separada de el de una forma definitiva.
La pugna sube de tono, en días próximos a las elecciones y para ello se han registrado ya varias planillas que buscaran llegar a la dirigencia sindical y quitar a una persona que intenta hacerse eterna en la dirigencia e incluso hablan de un posible proceso amañado en el que habrán de jugar un papel importante el dinero y las influencias de personajes del PRI del nivel federal, lo que sí tiene en sus manos la ex candidata a la alcaldía de Chilpancingo es una gran cantidad de billetes que habrá de utilizar en la compra de votos.
Las denuncias no se están haciendo esperar, los opositores a la priísta señalan que busca eternizarse en el sindicato e incluso mencionan que no hay transparencia en cuanto a la cifra real del padrón de electores, auguran sus contrincantes que se está preparando un mega fraude para las elecciones del primero de abril, día en que habrá de definirse quién habrá de dirigir los destinos del SNTSA 36 con sede en la capital del estado.
Los trabajadores demandan un cambio y no un Porfirio Díaz en este gremio sindical, toda vez que Bety Vélez busca a toda costa eternizarse al frente de dicha organización, tratando de emular a Elba Esther Gordillo Morales en el SNTE, caso similar pero de mayor magnitud, en tanto que si pierde esta posibilidad de reelegirle en la dirigencia, definitivamente estará aniquilada políticamente; por lo que busca es mantenerse como lideresa de los trabajadores cueste lo que cueste, en tanto que perdió las elecciones por la alcaldía de Chilpancingo y sus padrinos políticos en la federación como que le están dando la espalda, derivado a ello busca esta mujer atrincherarse en el SNTSA como única opción política, toda vez que la situación se viene muy crítica porque el PRI ya no está en la Presidencia de la República.
Si Bety Vélez no retiene el poder en el sindicato y pierde en las elecciones del primero de abril, así como sucedió con la alcaldía de Chilpancingo, será su tumba política, su único refugio es este para mantenerse en la escena política; pero todo va a depender de los demás candidatos hagan un buen trabajo de campaña, ya que se está diseñando una campaña de terror por parte de los oficiales y de miedo e incluso la misma compra de votos, puede ser una herramienta de Bety el día de las votaciones.
