*Elementos de la Marina Armada de México, Policía Federal y Policía del Estado sitiaron la tarde de ayer la casa de justicia de esa localidad de Acapulco, y desarmaron a policías de la UPOEG que tomaron ese lugar desde el pasado domingo tras balaceras que dejaron dos muertos y una mujer herida; el dirigente Bruno Plácido, atribuyó la violencia suscitada a grupos que venden el “huachicol”; habitantes bloquearon la México-Acapulco en protesta contra el operativo
Por Rangel Ventura
Chilpancingo de los Bravo, Gro., 04 de Marzo de 2019.- Elementos de la Marina Armada de México, Policía Federal y Policía del Estado sitiaron la tarde de ayer la casa de justicia de Xaltianguis, municipio de Acapulco, y desarmaron a policías comunitarios de la UPOEG que tomaron ese lugar desde el pasado domingo.
Los uniformados llegaron directamente a la casa de justicia del poblado la cual fue tomada por integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) que dirige Bruno Plácido Valerio, tras una serie de hechos de violencia que se originaron desde el pasado sábado por la noche, que dejaron un saldo de dos muertos y una mujer herida.
EL OPERATIVO
A las 15:00 horas de este lunes, unas 20 patrullas con efectivos de las corporaciones, arribaron a la comunidad, perteneciente a la zona rural del municipio de Acapulco y se dirigieron a la casa de justicia donde ingresaron a la base de la policía comunitaria, y tras intentar dialogar se generó un conato de enfrentamiento.
Los elementos de las fuerzas de seguridad, decomisaron el armamento de unos 15 comunitarios debido a que son de uso exclusivo de las fuerzas armadas, y fueron trasladadas a una patrulla de la Marina; pero luego de unas cuatro horas fueron devueltas.
Mientras se realizaba el operativo, helicópteros de la SEMAR sobrevolaron esta comunidad ubicada a 50 kilómetros del puerto.
En entrevista, el comandante de la UPOEG, Héctor Aguirre Jaime, confirmó que se buscaba desarmarlo a él, así como decomisar otras 10 armas largas y 10 cortas.
Derivado de esta acción, los pobladores bloquearon la carretera federal Acapulco-México en ambos sentidos, en protesta, donde atravesaron taxis colectivos y señalamientos, a unos metros de la comandancia comunitaria y el puente peatonal, mientras que los agentes policiacos se mantuvieron vigilando las inmediaciones de la zona y base policiaca.
POBLADORES BLOQUEAN LA ACAPULCO-MÉXICO
Después de cuatro horas de bloqueo a la carretera federal y diálogo con las fuerzas de seguridad, habitantes del poblado Xaltianguis impidieron el desarme de policías comunitarios de la UPOEG que dirige Bruno Plácido.
Los habitantes inconformes reprocharon a los agentes policiacos que desde el sábado que se registraron los ataques y enfrentamientos en el poblado, entre ambos policías, comunitarios y ciudadanos, no habían acudido, y sólo llegaron a desarmar a los policías.
Después de un intenso diálogo que incluyó discusiones, así como amenazas entre pobladores, se acordó que los policías comunitarios de la UPOEG continuarán encargados de la seguridad en Xaltianguis.
El comandante de la policía comunitaria, Héctor Aguirre Jaime, informó que los efectivos de seguridad pedían que sólo se quedara un grupo a cargo, lo cual no fue aceptado. Además, pedían la liberación de tres personas que la UPOEG tenía en reeducación desde hace mucho tiempo atrás, regido por los usos y costumbres, ya que son acusadas de los delitos de robo y de alterar el orden público.
De igual forma, se reportaron bloqueos carreteros por pobladores en localidades donde tiene presencia la policía comunitaria de la UPOEG, como El Bejuco y Lomas de Chapultepec.
BRUNO PLÁCIDO ATRIBUYE LA VIOLENCIA AL “HUACHICOL”
El dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, atribuyó la violencia suscitada a grupos que venden el “huachicol” (gasolina robada que comercializan de manera ilegal) en Guerrero.
Advirtió que desde que el gobierno federal inició acciones contra el robo de gasolina, la organización que encabeza interpuso denuncias ante el Ministerio Público, por robo de pipas y combustible.
Recordó que luego de que la UPOEG detuvo en Las Mesas y San Juan del Reparo, a tres ladrones de gasolina, en días pasados, confesaron que trabajaban para la banda de Los Dumbo, dedicada al robo de combustible y tráileres.
EL SÁBADO COMENZARON LOS HECHOS VIOLENTOS
El sábado por la noche, una vivienda donde se organizaba una fiesta fue atacada a balazos por hombres armados en el poblado de Xaltianguis en Acapulco; durante la madrugada derivado de la agresión un taxista fue asesinado a balazos y una mujer resultó herida, y la mañana del domingo, en un nuevo enfrentamiento un hombre fue ejecutado, informó el dirigente, Bruno Plácido Valerio, en conferencia de prensa a OBJETIVO Diario ese mismo día en el puerto.
El dirigente estatal de las autodefensas, informó que tras los enfrentamientos del fin de semana llegaron al poblado 100 policías ciudadanos de la UPOEG, pero que estaban preparados para desplazar unos 500 elementos más.
En esa ocasión, Plácido Valerio señaló que este enfrentamiento fue contra un grupo criminal, quienes están instalados como policías comunitarios en el poblado, y a quienes acusaron que son presuntos “huachicoleros” que operan en la zona.
Cabe señalar que como consecuencia de los enfrentamientos del domingo, pobladores informaron que al menos 15 escuelas suspendieron clases, entre ellos siete primarias, dos secundarias, el Colegio de Bachilleres que se ubica en la entrada al poblado, y jardines de niños.
Como parte del diálogo con autoridades ayer lunes, se acordó organizar una reunión en las próximas semanas para definir las acciones para el regreso a clases y determinar si el gobierno se encargará de la seguridad en Xaltianguis. (Por Rangel Ventura)
