Editorial
Hace unos días los mexicanos celebraremos y recordaremos las fiestas de fin de año, pero antes deberíamos reflexionar, ¿realmente debemos estar orgullosos de la situación actual de México? Con tantos problemas, crisis, violencia, homicidios y más, ¿estamos en condiciones de celebrar y vitorear que somos libres? ¿Lo somos? Nuestro País está en manos de unos pocos que deciden el rumbo del mismo, sin consultarlo con el pueblo que, de alguna forma, vive oprimido, sin voz, y que es manipulado todos los días por algunos medios masivos de comunicación. Mexicanos, estemos orgullosos de nuestros orígenes, de nuestra patria, mas no de nuestro Gobierno; en este 2019 celebremos nuestro espíritu navideño, nuestra autenticidad, nuestro ser, y cambiemos el «preocuparnos» por el «ocuparnos», despidamos el «ya merito» y recibamos al «nosotros podemos», dejemos atrás la mentalidad mediocre y conformista por una nueva, optimista, exigente, valiente y proactiva.